@alinerockbles
fotos cortesía tono.tv
Con los audífonos aislando completamente el exterior, sólo alcanzo a distinguir el breve sonido del
impacto de mis uñas con las teclas; el play está en Aurora Boreal y la voz de León
Larregui inunda mi cerebro mientras escribo la reseña de la presentación de
“Solstis”, el disco solista del
canta autor mexicano y vocalista de Zoé, que presentó el pasado viernes 15 de
febrero en la Ciudad de México.
En un Plaza Condesa abarrotado, a eso de las 10 de la noche la
gente coreaba “León, León”. La audiencia, mayormente femenina, se mezclaba
también con múltiples parejas que por supuesto ponían el ambiente romántico,
presas todavía del post día de San Valentín. Minutos después, el grito
inminente de los cientos de fanáticos se hizo presente en el recinto; un muy
elegante y totalmente dueño del escenario León
Larregui, fue recibido con fuertes aplausos dando inicio a la presentación,
en la que seríamos testigos no sólo de su calidad musical, su sensibilidad y la
mezcla visual (que viene haciendo muy bien desde el Unplugged de Zoe en vivo)
que acompaña cada canción, sino de esta nueva mirada a un mismo artista, desde
un lado mucho más íntimo.
La noche empezó con Aurora
Boreal, seguida de Carmín (que
dedicó a su mamá, que estaba en la audiencia), dando paso a Perdonar y llegando a la hermosa Souvenir, con dedicatorio a todos
aquellos que hayan sufrido mal de amores (y fueron muchos porque los gritos
iban en aumento). La noche seguía de lo mejor con Brillas, otro de los sencillos del álbum y Resistolux, la rola de resistencia social y ánimo juvenil (la que
me menos me gustaba hasta que la escuché en vivo!)
Para ese momento, el nivel de romanticismo de las rolas era
directamente proporcional al balanceo de las parejas que abrazadas, parecían
tiernos siameses unidos por la cintura balanceándose, y entonces Perdida total hizo su aparición seguida Femme Fatal.
Hago una pausa; para
suspirar por supuesto, y para hacer notar lo sorprendida que me sentí de la
presencia femenina en el concierto, que a cada frase o mueca del cantante
desprendían fuertísimos gritos de sus enardecidas gargantas, al más puro estilo
de la fan que se puede desmayar frente a su ídolo (nunca he ido a un concierto
de Luis Miguel pero dicen que las chavas gritan mucho ¿no? Así mas o menos).
Pasadas ya las 11 de la noche Resguardum Ether proyectaba de fondo un video que el mismo León
grabó durante el periodo de preparación del album; la escena se llenó de
flores, cielos, mares, León, su banda y escenas que acentuaban completamente el
feeling de esta canción. El fin llegó con Como
tú, que por supuesto nos hizo explotar en voces y aplausos; para el encore
cantó dos covers: Ain’t no sunshine
de Bill Withers y Girl de los
Beatles, rolas que refirió como parte de su inspiración para este album. Visiblemente
complacido y radiante, León Larregui se despidió de su
público, quienes también con cara de satisfacción, nos alejábamos con el regalo
de su música en el corazón. (Que cursi!,
se vale no? Es febrero todavía.)
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